martes, 21 de julio de 2009

Efecto “Tierra tragame ya”

Hoy fue un día de lluvia muy intensa, uno de esos días que inspirarían incluso a “Jack, el destripador” a escribir unas líneas. Pero lejos de cualquier situación de “mariposas en la panza” (por que estaba en el horario de almuerzo de mi jornada laboral y nada me motiva menos que eso) a mi mente vino una pregunta muy particular, y es la siguiente: ¿Por qué una mujer, en la semana 2 o 3 –de estar conociendo a alguien- es capaz de “meter la pata” con tanta facilidad, diciendo expresiones impropias al momento de la relación y frente a …“él”…? (lo que no es un detalle menor).
Para que no les queden dudas de, a que me refiero, les amplio con las siguientes descripciones:
Caso de estudio 1) El y ella, en una charla telefónica, común e inocente, llegan al punto en que él le confiesa que estaba metido en una situación que podía resultarles adversa para ambos, dado que a causa del destino, él, ese día, no tenía agua, y no iba a poder bañarse antes de ir a verla. A lo que ella muy locuaz, le responde: “no importa se le QUIERE igual” (Dios nooo!!! Que acabo de decir!!! Solo le faltaba agregarle “mi amor” y era una declaración completa).
Pero eso no es todo, vayamos al …
Caso de estudio 2) El y ella, en un living-comedor (que podía ser de cualquiera de los dos), bromeando respecto al hecho de que ella, le queda justo a la altura de los brazos de él y por ello él puede abrazarla mejor, toda esta escena transcurriendo con frescura y sana cotidianeidad, hasta que ella con una seguridad implacable lanza al espacio común: -“Viste, tu tienes una NOVIA perfecta ya te lo decía yo” (nuuuu, hundida peor que el Titanic!!!! Por que lo dijo?? Por que le salió con esas palabras?? Por que? Por que? Y mil veces por que?).
Si bien no tengo claro aun el “por que sucede”, de lo que si estoy convencida, es de que sendas contestaciones, aunque salieron con tono de chiste, fueron literalmente escupidas desde el centro mismo del corazón!! Y esto se los podría casi confirmar (por que fui yo, quien cometió unos de los exabruptos en cuestión, de hecho cargo con haber dicho el primero, el segundo gracias a Dios, aun no!!).
Sinceramente creo que “de tonto y de loco, todos tenemos un poco”, pero me inquieta saber ¿que nivel de traición maneja nuestro inconsciente?¿hasta donde piensa sumergirnos?. Y claro, me digo! pues él, no tiene que asumir luego las consecuencias de un corazón roto!! Por que quienes saben mucho del tema, aseguran que frases así a la segunda semana, nunca jamás, te acercaran a tu ser querido y mucho menos si lo deseas a un marido que te mantenga!!.
En definitiva, luego de exponerles estos casos de estudio, me obligue a analizarlos y estoy en condiciones de hacerles un boceto de cómo ocurren para mi, estos “desafortunados” hechos.
Nuestro corazón siente, el subconsciente lo lee, y ahí enseguidita viene este último, jugándonos una muy mala (malísima) pasada, tomando las riendas de nuestro propio ser y decir y nos hace lanzar expresiones al cosmos, que de seguro hubiéramos preferido disimular (al menos en un comienzo). La frutilla del postre, titulo de la nota, es ese fuego interno que se siente cuando uno entra en razón. Ese segundo de Eureka, en que nos damos cuenta que aquello que acabamos de decir, es directamente proporcional, al final de algo, que casi no había comenzado aun. Por Dios! “Tierra trágame” y que sea pronto, por favor.
Desafío a quienes lean esto, a que me digan que nunca les a pasado algo similar!! Vamos!! que no podemos ser las únicas dos mujeres en el planeta, que han pasado por terrible brete!! Cuenten sus experiencias, digan por que creen que sucede, y por favor sírvanse aportar ideas para salir airosas de algo semejante, dado que podría afirmar que no será la última vez que esto ocurra.

jueves, 16 de julio de 2009

“Sex and the City”

Anoche tuve una cena a la que prácticamente no le falto nada…
Hubo un buen vino tinto, asado, ricas papas fritas, ensalada y 3 amigas formidables. Esta cita se dio en un glamoroso resto de Palermo. Casi que por momentos me creí Charlotte York, en la serie “Sex and the City” (esta de más decir que no califico como Carrie Bradshaw, ni como Miranda, menos como Samantha!! (Y Charlotte en su etapa de soltera esta bien para mi).
Mis buenas tres amigas trataban de hacerme entender que era esto de: “The rules”; que al parecer es un libro muy reconocido (disculpen mi ignorancia) donde publican 10 máximas para retener al hombre exactamente interesado (como lo deseamos) a tu lado –al menos esa fue la lectura que me lleve de sus comentarios-.
Tuve el gusto de compartir la cena con una colega de equipo de este blog, quien generosamente trato de hacerme entender que la aplicación a “rajatabla” de estas reglas, no es eterna (estoy en problemas si así fuera) y me explicaba que es un juego inicial, es decir hasta que dos personas se conocen definitivamente.
Si queremos un marido verdaderamente interesado en nosotras -y que tal vez en un futuro nos mantenga-, deberíamos a los comienzos de la relación (según mandan “las reglas”) aparecer y desaparecer, es decir, buscar denodadamente que el hombre muestre un movimiento similar al del “hombre que rema” cuando algo le interesa. Esto sería con el objeto de darle espacio, de dejarnos “cazar”. Hasta que esto no este verificado empíricamente no podremos entregarnos por completo y hacer caso omiso a “las reglas”. Mientras tanto debemos aferrarnos a ellas cual “la neta” ("verdad revelada", para los no chilangos).
Esto me llevo a la siguiente reflexión; “Homo”, es un género que incluye a los seres humanos que somos hoy y a nuestros muy lejanos y extintos parientes. De hecho el único contemporáneo a nosotros es el Homo Sapiens. Este último homo, el “hombre que piensa” no fue el primero, hubo varios antes, por lo que asumo, que en la primer versión de hombre/mujer solo estaba desarrollado el instinto a sentir, a mantenerse vivo y luego algo en él se fue perfeccionando y vino el famoso “sapiens”. Ese que puede discernir. ¿A que voy con esto?... si históricamente ya tenemos confirmado que en el hombre primero se desarrollo la “emoción” y luego recién la capacidad de “analizarlas” como quieren hacerme entender a mi … (muy limitada homo sapiens) que inicialmente debo “pensar” y luego debo “sentir”.
¿Ustedes que opinan?...

lunes, 13 de julio de 2009

Me mantendrías por siempre?

Este mensaje es para vos que no lees este blog y es tambien para quienes lo leen y les interesa compartir mi solicitud. Permitan que hoy escriba en segunda persona, es importante que el universo la reciba así y quizás, en una de esas, logre algún tipo de respuesta cósmica.

La palabra Siempre es sin duda una palabra grande. En general, en términos de relaciones, "siempre" me provoca comezón... será por que los amorosos "siempre" se están yendo?... Igual, entre siempres y nuncas, me detengo para pedírtelo así: Me mantendrías por siempre? y para aclarlo un poco más (antes de que me acusen de espantanovios), me mantendrías por siempre así?

Mantenme feliz, mantenme cantando en la mañana de lunes, mantenme ilusionada, mantenme cursi, mantenme tan sobrecargada de emoción que mis ojos no paren de llorar. Mantenme así... por siempre.

viernes, 10 de julio de 2009

No...definitivamente...no quiero…
Dicen que en la diversidad esta el gusto…
Por ello me permito desde mi primer escrito, ir en disidencia con algunas colegas del equipo.
Aunque tal vez, mi opinión, no se trate de una contradicción absoluta, sino de otro punto de vista.
A la pregunta, “ ¿usted quiere un marido que la mantenga?”, mi respuesta inicial sería: -“en esos términos, NO, nunca.”
No puedo dejar de asociar la palabra “mantener” a lo que han hecho mis padres conmigo durante mi infancia, o mi adolescencia. Mantener para mi es sinónimo de “te mantengo económicamente, y dependerás de mi, en tanto eso dure” .
Por eso es que no quiero un marido que me mantenga de ese modo, es más, la sola idea, me causa irritación.
Lo que si quiero y busco cada día, desde que me levanto, hasta que me duermo (incluso a veces aun en sueños) es un compañero que me ame, con todo lo que ello significa, un compañero que me contenga, un compañero con el que nos completemos emocional y espiritualmente, un compañero con el cual pueda compartir mis deseos, mis ilusiones, la vida.
Y cabe aclarar, que solo si los condicionamientos del contexto cultural me acorralan, lo llamaré “marido”, sino será llamado “amor mío” eternamente, y nunca “marido”!!

miércoles, 1 de julio de 2009

de manutenciòn y otros menesteres

Mira que sé del tema, un largo y pesado divorcio y una pelea durísima por el régimen de convivencia creo que me dan la autoridad para hablar del tema.

Quiero iniciar mi participación con la descripción de la real academia de lo que significa la palabra “manutención”.

Manutención. (De manutener)

1. Acción o efecto de mantener o mantenerse

2. Conjunto de operaciones de almacenaje, manipulación y aprovisionamiento de piezas, mercancías, etc.

3. Conservación y amparo.

La que me gusta más es la tercera…. Conservación y amparo. Quienes son candidatos de amparo? Seguramente dos tipos de personas: las que lo necesitan y las que no lo necesitan

En el primer grupo se encuentran los menores, los desvalidos, los ancianos muuuuuuuy ancianos, los animales (aquí entra perfecto la palabra conservación) y un par de etcéteras más que en este momento se me van….

En el segundo grupo se encuentran las personas que son productivas, millonarias, artistas e intelectuales pertenecen a este grupo.

Y creo que aquí va la carnita del asunto…. Se vale!, por supuesto que se vale querer que alguien nos ame, nos de protección, nos de amparo y nos haga sentir que podemos luchar contra el mundo bajo el escudo protector de un financiamiento “seguro”

El mundo ideal está lleno de esos príncipes y quizá 2 o 3 se escaparon de la Tierra de la Fantasía para hacer sumamente felices a 2 o 3 privilegiadas, que obviamente no somos ni tù ni yo.

Lo que es real, es que en esta vida siempre hay un balance, a veces ese balance es medio truculento y se parece más a un sabotaje pero esto es medio karmatico.

El perfecto equilibrio se da, incluso en la manutención. Y para conseguir financiamiento hay que retribuir al mismo, descartando (a veces) al grupo de los que lo necesitan, siempre tienes que dar algo a cambio…. Algunas veces esa transacción hasta la realizamos gustosas pero a veces invade tu individualidad, tu poder de decisión, tu libertad. Y es aquí en donde tenemos que estar previamente muy seguras de saber cuál es el precio y estar dispuestas a pagarlo, aún cuando no te des cuenta.

A estas alturas me he vuelto inasombrable, es más, cuando escucho en las noticias que fulanita firmo un contrato prenupcial hasta digo va, esa sí que piensa lo que hace. Yo creo que se vale, se vale querer que alguien nos mantenga, se vale sentirnos un poquito despreocupadas del día siguiente, se vale echar a volar el espíritu, sólo que hay que hacerlo con los pies en la Tierra y si no estás dispuesta a exponer tus ideales, creo que debes pensarlo más de 2 veces.

Hoy escuchaba en la radio el tema de matrimonio y la conductora defendía el hecho de hacer contratos de matrimonio caducables… suena evolucionado, no? Pero… y si los 2 involucrados no estamos en ese nivel de evolución?, qué onda con la renovación? Y si ya no quieren renovarte?

Bueno en mi cabecita empezaron a desarrollarse mil ideas y estas coincidieron con la conductora…. Lo lleve al plano empresarial, que pasa con una relación cliente proveedor? Si no la atiendes, la consientes, le cumples y por sobre todo la respetas, lo más probable es que el cliente no te renueve. Por el contrario si eres un cliente que no paga, que se queja de cualquier cosa, que es caprichoso y da problemas, a lo mejor es el proveedor quien decide no renovar el contrato. En fin, que es cosa de dos. Y si estas consciente de que matrimonio no significa vivieron felices por siempre y que el amor todo lo puede…. Creo que es una relación muy benéfica para ambos, que se renueva, que se conquista y que se fortalece día a día

El único amor incondicional es el que tienes por un hijo aunque aun en tu corazoncito esperes que se haga el próximo Tiger Woods y que te saque de pobre… pero no pasa nada si él decide sabiamente hacer su vida y dejarte a ti hacer la tuya.