lunes, 14 de diciembre de 2009

16 going on 30

Se han cumplido ya 6 meses de que este blog tocó el aire del universo digital. Seis meses y treinta entradas después, este blog se nutrió de la cooperación entre un grupo de mujeres con intereses comunes y visiones diferentes, y creció y existió gracias a esas mujeres que me hicieron el honor de participar en la idea que nació de una tarde de ocio, como muchas que hubo en Buenos Aires (ideas y tardes de ocio por igual).
No te asustes si al leer, encuentras en las palabras algo del color de una despedida. Creo en la evolución y en el cambio. Creo en la dinámica de los espacios a través del tiempo. Y es ese credo el que, 16 entradas después, me hace pensar que es momento de evolucionar este blog.

Poco a poco los intereses de algunas de mis queridísimas colegas, las han llevado por otros caminos, algunos más románticos, otros más introspectivos y algunos otros tan mundanos como este blog. Y poco a poco, este blog se volvió un monólogo.

Y no che, no tengo nada contra los monólogos. Al contrario, me encantan y, precisamente por ello, creo que ha llegado el momento de evolucionar. Buscar otros espacios para seguir vomitando con ustedes los retorcimientos del alma. No me despido, por que sé que siempre tendré esta misma necesidad de poner por escrito aquello que de otra forma no logra salir de mi. Ya encontraré un espacio para invitarlos, a que ustedes lo hagan un diálogo, como lo hicieron con sus comentarios durante la mitad de un año en este espacio.

Ha sido un lindo viaje, pero quedan aún mas dimensiones por explorar. Nos vemos en el siguiente blog.


Quierounmaridoquememantenga cierra hoy, casi con el año que lo vió nacer. Espero encontrarte al abrir la siguiente puerta. Gracias mil. No te vayas de mi.






martes, 8 de diciembre de 2009

Soñar contigo

Fué abrir los ojos del recuerdo y darme cuenta de lo mucho que te miré y te sentí sin sentirlo. Después de nisiquierasécuántosdías apareces envuelto en visiones nocturnas, pero te distingues de ellas por la claridad de tu definición.
Tu risa es tan clara... todas tus risas lo son: La corta, la de compromiso, la ahogada, la abierta; todas con un sonido distinto, cada una que sale de una sonrisa diferente que no es otra que la tuya, pero que se modifica sutilmente de acuerdo a la ocasión.
No sé de qué hablas, pero no puedo dejar de escuchar tu voz. Es tan clara y tan tuya... Es tan extraño que la recuerde tan así... tan tú. Es tan tú como tus dimensiones. Tu ropa y tus detalles. Tu mirada y tus manos. Tu casi fingido rubor ante un elogio bien merecido. Tanta exactitud y tanto detalle me impulsan a decírtelo así, sin pudor, abierta, públicamente y por escrito lo siguiente:






SAL DE MI CABEZA!!!!

martes, 1 de diciembre de 2009

Dicen las que saben

Dicen quienes lo saben, por que ya pasaron por ahí, que tener un hijo es el mejor regalo que la vida te puede dar. Dicen que la vida cambia, tus perspectivas, tus ambiciones, tus prioridades, tus horarios y hasta tu vida social. Dicen que sólo entonces comprendes las verdaderas dimensiones de palabras como "amor", "dolor"... "miedo" o "sonrisa".
La vida se las arregló (o me las arreglé yo, andá a saber!) para que yo no tuviera la fortuna de aprender eso de primera mano. Debe ser que no fui tan buena niña, pero a mi no me tocó ese regalo. Al menos no aún, aunque mis expectativas de recibirlo se aproximan peligrosamente a cero.

Consciente de que es difícil que yo tenga un hijo pronto, no dejo de apreciar que tengo la fortuna de estar rodeada de madres y, siempre que puedo, trato de alimentarme con su la sabiduría que cada una de ellas va adquiriendo a lo largo de su vida. Pero no puedo evitar sentir que es como darle el golpe al humo del cigarro que alguien está fumando por ahi cerca.. como fumar de prestado. A estas alturas y cerca de la maravillosa edad que me hará sentirme parte de esa cursi y gastada canción de Arjona, me pregunto si todas las decisiones de mi vida han sido acertadas... si no sería lindo prender mi propio cigarrillo y vivir y morir la experiencia de cambiar mi vida.

No es una cuestión de buscar una razón de arrepentimiento, sino un claro ejercicio de ubicarme en mi entorno presente, evaluar mis experiencias anteriores y replantear lo que quiero en adelante. A mis 25, cuando me casé, estaba segura de que ser madre no era para mi.Ni mi tempreamento ni mi inquietud constante eran un cuadro ideal para darle vida a un ser humano más. Pero claramente tenía 25 años. Inmadura, insegura, y casada con el personaje equivocado; me parece que el destino fue muy acertado al coincidir conmigo en que no era el momento.

Pero... y después? Mucho trabajo, progreso profesional, cambios, fusiones, crecimientos... mucho de la ejecutiva, mucho crecimiento interior tambien... pero al parecer no el suficiente.


Luego el desarraigo, la maestría, el rejuvenecimiento inesperado... el regreso. La aplastadora realidad de vivir en una ciudad cara con un presupuesto muy limitado. En papel, definitivamente tampoco pareciera ser el momento ideal... pero Arjona sostiene que es momento de ponerle vida a mis años... y cuando pienso en esa frase, me doy cuenta de el anhelo escondido, reprimido y agachado que mi alma me susurra en cada instante de silencio...

Dicen las que saben que la llegada de un hijo siempre se da en el momento en que debe darse. Nunca antes, nunca después....

Yo no lo sé... nunca me fumé el cigarrillo de primera mano.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Tu te atreves?

Asumamos que has leído de este blog lo suficiente como para enterarte de qué demonios se trata este desmadrito. Cada personaje que acá escribe tiene una posición muy clara frente al título del blog y participa de esta iniciativa con una clara idea de lo que piensa sobre él.
Asumamos que vos tenés una posición también. Variando desde el quieroamipríncipeazul, quierolaparjaideal, noquierocompromisos, y pasando por el quieroalgoperonoséqué, hasta el yanoquieroTENERquetrabajar... todos los puntos de vista confluyen en este espacio. Y tu, con tu propia conjunción de palabras, seguramentente estás leyendo esto por que te agrada la idea; ya sea como una solicitud al cosmos o como un sarcasmo medio incomprendido...
Yo me fascino de ver las respuestas que se dan con un nombre como quierounmaridoquememantenga. Me asombro de ver la cantidad de reacciones tan distintas en su naturaleza que va uno recibiendo de diferentes personas de diferentes demographics. Pero además de fascinarme, asombrarme y muchas veces, tambien divertirme, a mí me enorgullece tener una parte en este proyecto. Me encanta decir a los 4 vientos que YOQUIEROUNMARIDOQUEMEMANTENGA, por todas esas razones que he ido contando en entradas anteriores. Yo... yo puedo hablar de este blog con conocidos y desconocidos. Puedo bromear sobre él aunque me llamen espantanovios, mujer desesperada, no sé... lo que se te ocurra. Supongo que eso es uno de los privilegios de sentirme cómoda en mi piel y en mi entorno.
Pero cuéntame tu... le cuentas a tus amigos que lees este blog? Nos has recomendado? Nos posteas como link recomendado en Facebook? Tu te atreverías a decir en voz alta: quierounmaridoquememantenga?

lunes, 23 de noviembre de 2009

WHAT OPRAH HAD TO SAY ABOUT MEN

Oprah courtesy

WHAT OPRAH HAD TO SAY ABOUT MEN (allegedly said?)
If a man wants you, nothing can keep him away.
If he doesn't want you, nothing can make him stay.
Stop making excuses for a man and his behaviour.
Allow your intuition (or spirit) to save you from heartache.
Stop trying to change yourself for a relationship that's not meant to be.
Slower is better. Never live your life for a man before you find what
makes you truly happy.
If a relationship ends because the man was not treating you as you deserve
then heck no, you can't "be friends".
A friend wouldn't mistreat a friend.
Don't settle. If you feel like he is stringing you along, then he probably is.
Don't stay because you think "it will get better."
You'll be mad at yourself a year later for staying when things are not better.
The only person you can control in a relationship is you.
Avoid men who've got a bunch of children by a bunch of different women.
He didn't marry them when he got them pregnant, why would he treat you
any differently?
Always have your own set of friends separate from his.
Maintain boundaries in how a guy treats you. If something bothers you, speak
up.
Never let a man know everything.* He will use it against you later.
You cannot change a man's behaviour.* Change comes from within.
Don't EVER make him feel he is more important than you are... even if he has
more education or in a better job.
Do not make him into a quasi-god. He is a man, nothing more nothing less.
Never let a man define who you are.
Never borrow someone else's man.
If he cheated with you, he'll cheat on you.
A man will only treat you the way you ALLOW him to treat you.
All men are NOT dogs.
You should not be the one doing all the bending...compromise is two way
street.
You need time to heal between relationships...there is nothing cute about
baggage...
deal with your issues before pursuing a new relationship
You should never look for someone to COMPLETE you..
a relationship consists of two WHOLE individuals..
look for someone complimentary...not supplementary.
Dating is fun...even if he doesn't turn out to be Mr. Right.
Make him miss you sometimes...when a man always know where you are,
and you're always readily available to him - he takes it for granted.
Never move into his mother's house. Never co-sign for a man.
Share this with other women and men (just so they know)... You'll
make someone smile, another rethink her choices, and another woman
prepare.
They say it takes a minute to find a special person,
an hour to appreciate them, a day to love them and
an entire lifetime to forget them.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Volví


Mi padre tenía una frase muy simple, muy sabia y muy real. El solía decir: “cuando las cosas se tienen que hacer, se hacen”. No había réplica válida, puchero o lagrimita chantajeadora capaz de cambiar la sentencia de esa frase. Si tenías que hacer algo, simplemente lo hacías.

Y es así que después de resistirme durante algunos meses a dejar Buenos Aires y enfrentar mis temores de desandar mis caminos; hace un mes, finalmente volví. Simplemente por que tenía que hacerlo, sin pucheros ni réplicas. Tenía miedo (creo que acá lo dejé escrito hace tiempo), miedo de volver, de no pertenecer, de asilarme en la casa familiar, de reencontrarme con mucha gente, de que se dieran cuenta de que yo volví, pero desde otro lugar interior. Por que hoy yo soy una mujer distinta a la que vivió acá 3 años antes y me asustaba la idea de que esta “nueva yo” no se sintiera bien de vuelta en la ciudad que alguna vez fue de las combis verdes y hoy, para mi sorpresa, es de los taxis dorado con rojo.

Volví. Cinco tontísimas letras y un camino largo para conseguirlo. Las despedidas, el empaque, el camino a Ezeiza, el tragarte las lágrimas. Muestras el boleto, caminas, giras un poco, sonríes, te despides de esas tres caritas que se tragan las lágrimas igual que tu. Te despides de ellos, de una experiencia, de una ciudad y de un sueño. Sonríes y tragas una lágrima más. Con pies de plomo, en tu cabeza resuena la frase : “cuando las cosas se tienen que hacer…” sigues tu camino. Hasta siempre Buenos Aires, un poco de ti se va pegado a mi alma…

Sabes que vas a llegar a la Ciudad de México desde el momento en que alcanzas a ver su humo en el horizonte. Como si fuera su aura, la ciudad se apropia del cielo pintándolo en un color que habla de historia, de arrebato, de bullicio, de descontrol, de magia… de hogar… La cara de tu familia que espera te dice que no te equivocaste, algo de hogar es México. Conforme van pasando los días, vas reconociendo espacios y reencontrando las caras de los amigos que dejaste (de aquellos que son de verdad). Te das cuenta de que ellos tambien han cambiado. Pero entre ellos y tu, como entre tu y los que quedaron en Buenos Aires sabes que sólo hay un lazo… ese lazo que hace de todos los fuegos el mismo fuego. Los que son y los que están, no se van. Punto.
He vuelto y soy muy feliz. He vuelto y no siento más el miedo. Cerca de mí está volver a empezar, trabajar, volver a tener… cerca de mí, está renacer. Volví.


A las caritas tragalágrimas de Ezeiza… G R A C I A S.

A la familia que me esperó, a los amigos que están… G R A C I A S.

A mi papá por enseñarme tanto… TE EXTRAÑO.

sábado, 10 de octubre de 2009

1er Etapa: El nacimiento

“¿Donde voy?, ¿donde estoy?, ¿quien soy yo?, ¿que hora es?, ¿donde estaré? (…)”
¿Te suena familiar ese momento, en que te sentiste tocar fondo?
Y no estoy hablando de estar emocionalmente deprimido, justamente quiero significar lo contrario. Me refiero a cuando te detenes un segundo, miras a tu alrededor, tomas conciencia de donde estas y decís: -“OK. Aquí me encuentro (una vez más) en el punto cero”.
Ya lloraste, ya te enojaste, ya te perdonaste. Ahora solo resta, repasar los hechos y sobre ellos, la “fácil” tarea de aprender y desaprender. Lo cual puede resultar todo un desafío (al menos para mí), por que “aprender” muchas veces significa un NO hacer, un NO dar, un solo esperar y estar atento…y… “desaprender”… que tampoco es menuda tarea! Por que bien difícil es, dejar de lado eso que alguna vez hiciste carne y ahora te das cuenta…que tal vez no era tan así… ja! (alguien que me mande un GPS por favor…).
“Vaciar, para dejar llenar” me repite el último filósofo que frecuente (léase psicólogo), y si… Así será…como cuando una persona nace. Está todo por comenzar, es todo nuevo y nadie se negaría a recibirlo o conocerlo… (yo tengo la ventajita de que llevo 33 encima y algunas lecciones ya aprendí… así que algunas postas podré saltearme sin mayores inconvenientes)…
No se tu, pero yo, creo que es un buen comienzo ese de “plantar bandera” y sentirse en el nacimiento de algo. Tal vez en el camino hasta me decida por un marido que me mantenga, ja! (mentira…eso jamás, ya lo he dicho) en mi caso particular esta reflexión me conduce a que la próxima vez que reciba “algo” pueda disfrutarlo sinceramente. Sin expectativas, ni presiones, solo tomar eso que la vida me manda y VIVIRLO, nada más, ni nada menos que eso.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Un poco de rosa para tanto verde.

Este video es una aportación de nuestra querida J-Lo que se inspiró en el verde primaveral del blog y quiso añadirle un poco de rosa.
Escuchen la letra de la canción. Las recomendaciones para conseguir a un marido que las mantenga. Claramente, es la búqueda más antigua de la humanidad... Ja!

(que quede constancia de que no escribí yo, solo retransmití una aportación de JLo)






y para las que no tienen buen oido, acá la letra:


Wishin', and hopin', and thinkin', and prayin',
Plannin' and dreamin' each night of his charms,
That won't get you into his arms.
So if you're looking for love you can share,

All you gotta to is hold him,
And kiss him, and love him,
And show him that you care.

Show him that you care, just for him.
Do the things that he likes to do.
Wear your hair just for him,
Cause you won't get him, thinkin' and a-prayin',
Wishin' and a-hopin'.
'Cause wishin', and hopin',
And thinkin', and prayin',
Plannin' and dreamin' his kisses will start,

That won't get you into his heart!
So if you're thinkin' how great true love is,
All you gotta do is hold him, and kiss him,
And squeeze him, and love him.
Just do it!
And after you do, you will be his.

You will be his.
You will be his!

jueves, 24 de septiembre de 2009

Ayer me cagaron a pedos.

De antemano me disculpo si alguien se siente alterado por un título como el de hoy. En una frase muy argenta, que en aplicación real significaría que me regañaron, pero es tan explícita, tan divertida, que me tomé la libertad de usarla como título.

Algo de humor le tengo que poner al día, que después de la maltratada de ayer, estaba convencida de no escribir durante un buen tiempo en este blog. Y es que, si bajas un poco, te darás cuenta de que no he parado de publicar posts. Le robé la voz a mis compañeras y me apropié del espacio. Ayer cuando leía, conté mis participaciones del mes y bueno, creo que he acaparado la pantalla. Reciban todos ustedes una sincera disculpa de esta aspirante a uña de cronopio.

Ayer cenaba con una de las colegas del blog (por que a la otra se le descompuso el bondi) y no sé si por la cena, la cerveza, la frustración de saber que mi tiempo en estas tierras está llegando a su final y con él la posibilidad de seguir formando parte activa en la vida de mis amigas, o que sé yo por qué; ayer simplemente opiné fuerte y sin reparo. Como sicario. A quemarropa. Y sin que me lo pidieran. Unsolicited feedback. Y además usé teorías que incomodan a la persona que tenía del otro lado en la mesa. Teorías de lianas.

Ella me escuchó (con la ceja levantada, como se debe hacer en un caso como este) y al final me dijo (en un breve resumen de palabras dulces dichas en tono bajito y con mucho cariño) que soy intolerante y que yo juzgo la vida de los demás bajo mis propios parámetros. Y remató preguntándome cómo esperaba yo que ella siguiera publicando sus más profundos pensamientos, si cada vez que lo hace yo la hago mierda con mis comentarios.

Yo me traté de defender diciendo que tengo opiniones. Que en un juicio hay un veredicto y que yo no me considero nadie para juzgar nada. Pero también, creo que si tengo un conjunto de neuronas que interactúan entre sí para aprender de la vida, pues tengo derecho de tener opiniones.

Les cuento un poco que la mujer que tenía yo enfrente es una mujer grande, de esa gente grande que hace que el mundo parezca menos feroz a su lado. Un corazón que da, un hombro que consuela, una cabeza que cuestiona y un espíritu en busca de su lugar en el cosmos. El asunto es que no ella no es fácil entrar en juegos de palabras. Juegos que a mí me fascinan y me dan siempre la oportunidad de salir de una conversación que me incomoda. Mi amiga tiene la capacidad de detectar mis juegos de palabras aún antes de que sean planteados. Quizá por esa razón lo único que me dijo fue: “Lee. Entra al blog y lee lo que has escrito. Lee tus juicios sobre lo que hemos escrito otras personas, lee tus “opiniones” en tus posts. Lee y léete.”

Y hoy me leí.


No cabe duda de que uno aprende todos los días de esta corta vida.

lunes, 21 de septiembre de 2009

De Rapunzel a Fiona- por nuestro propio Shrek

Alguna vez escondiste algo sobre ti, iniciando tu callada confesión con palabras como “Tengo una amiga que…” ?? Bien. Este no es el caso. Tengo mucho que confesar, pero hoy quiero hablar de una amiga.

Tengo una amiga que me sorprende. No sé como lo hace, siempre se las arregla para sorprenderme un poco más. Tuve el privilegio de conocerla durante alguna época de mi desempeño profesional y, si bien joven, me sorprendió su capacidad de aprendizaje increíblemente rápida, su forma positiva para buscar y proponer soluciones, su ambición por el logro de resultados y su actitud valiente de defender sus puntos de vista. Fue una suerte trabajar a su lado, pero fui aún mas afortunada cuando me dio la posibilidad de conocerla como persona y me ofreció su amistad. Le quiero, le valoro muchísimo y trato, a pesar de la distancia, de seguir acompañándole por sus topes contra la vida.

Dije sus topes contra la vida? Si, es lo que quise decir. Y es que mi amiga, es un ser humano, es una mujer y es por eso que aún tiene mucho para sorprenderme.

Sin entrar en detalles propios de un confesionario, y con el único fin de poner antecedentes al título del post de hoy, les cuento que mi amiga tiene un novio de muuuuchos años, a quien quiere bien. Sin embargo (cuántas pasamos por ahi?) no se siente completa y en ese nosentirsecompleta, se mete frecuentemente en “relaciones” paralelas que no tienen salida. Siempre tiene una buena razón que va desde la química irresistible hasta la conexión especial… en realidad, la razón que pareciera ser la de fondo es que sigue buscando a ese hombre que la haga dejar lo que tiene, en búsqueda de un futuro perfecto.

Hoy mientras hablaba con ella (chateaba, en realidad) y le pedía permiso para usarla como ejemplo, me dí cuenta de una de las cosas a las que las mujeres de hoy tenemos que enfrentarnos (si, una más): El cuento de Rapunzel. Esa princesa atrapada en la torre a quien un príncipe encantado rescata de las fauces del monstruo que la mantiene encerrada. Ella, rubia de rizos largos, le tiende su cabello trenzado para que el príncipe pueda llegar hasta lo alto de la torre y liberarla. Además de besarla, claro y tomarla de la mano mientras juntos caminan hacia el felices para siempre.

Me indigna tanto esa historia! Y me indigna más cuando la veo aplicada a la vida real. Cuando veo a mujeres talentosas atrapadas en una torre construida por ellas mismas… ellas, que han hecho de su relación actual, de su soledad o de su vida, ese monstruo del que se asustan… del que gritan pidiendo ser liberadas.. del que esperan –algún día ya pronto- lograr escapar. Pero para eso necesitan esperar a su príncipe. A ese, que va a tomar la decisión por ellas, que va a luchar hasta conquistarlas y tenerlas a su lado. Que está dispuesto a dejar a su novia/esposa/whatever para correr a rescatar a alguien que se ha hecho de problemas sola y que es incapaz de rescatarse por si misma.

Y mientras me indigno pienso en Shrek (si les dije que amo las pelis para niños?). Viene a mi mente ese ogro empujado por las circunstancias a rescatar a una princesa. Una princesa que, sea dicho claramente, lo único que no necesita es ser rescatada. Luchadora, fuerte y decidida, Fiona sólo espera al príncipe por que le dijeron que tiene que esperarlo para ser juntos felices para siempre. Pero cuando llega la hora se libera un poco sola, acompañada por Shrek ( a quien cree el Príncipe Encantado).

Después de leer los comentarios que ustedes amablemente han ido dejando, el tema “salí a buscarlo, no lo esperes” se ha vuelto recurrente. Tenemos que pelear entonces contra la inercia del esperar al príncipe. Contra todos los cuentos que nos contaron. Y armarnos en Fiona. Y correr a su encuentro. Y liberarnos solas de nuestros miedos, de nuestro pasado, de nuestro pesado equipaje, de nuestros prejuicios, de los cuentos que nos seguimos contando cada día, de las princesas lindas de largas trenzas y de los príncipes encantados.

“Una mujer valiente, una mujer sonriente” diría Bebe. Una que “ha calzado tacones para hacer sonar sus pasos”. Carajo. A todas las princesas de este mundo (a ti incluída), va mi mensaje, mi grito desesperado: BASTA!!! Toma las riendas de la vida, salí a vivir por tu decisión. No por el consejo de las cartas, ni por el destino, ni por los príncipes. Por ti!!!! Por que los minutos ya se fueron mientras leías, mientras te dio miedo, mientras dudaste.

Yo sé que me estás leyendo. Y sé que un poco de sonrisa cínica se te escapa por ahí. Si, entiendo. Esa sonrisa cínica también está en mi cara mientras escribo. No dije nada nuevo, cierto? Sé que el tema no es liberarnos, sino qué demonios tenemos que hacer para liberarnos. Lo siento, pero ahí es donde yo aprendo de ti.

Hasta aquí mis pensamientos, me comentas los tuyos? Dale, deja un comentario, aunque empieces diciendo: “Tengo una amiga que….”

jueves, 17 de septiembre de 2009

Zumbo como un panal

Cada poro en mi piel te presiente.. estás cerca. Me gusta sentir la vibración que se produce en mi pecho por la anticipación de ti. Es bueno no tenerte sólo por que me gusta desearte. Me quemo.
Ven, quiero sudarte en mi piel. Ven, quiero retorcerme de amor.
No vengas y deja que vaya hacia ti. Deja que sea el mismo deseo quien me haga girar, correr, buscar y seguir deseando.

¿Quién demonios me entiende?

jueves, 10 de septiembre de 2009

How to lose a guy...


Yo sigo inspirada por esa película simplona pero muy real. El problema ahora es que me he dado cuenta de que estoy acaparando los espacios publicados en este blog. La verdad es que sentiría un poco de culpa si no supiera que la verdadera razón por la que mi firma empieza a predominar es por que soy, dentro del grupo de personas que aportan al contenido de este espacio, la más "desocupadita". (En diminutivo no suena a paria desempleada sin objetivo en la vida, jajaja!)

Asi es que, sin el más mínimo asomo de culpa, me dirijo a ustedes para pedir que me detengan de una vez. Estoy un poco cansada de llevar la voz predominante de este coro y seguramente ustedes tambien se han hartado de oirme. Además, canto horrible. Es por ello que esta vez, les pido ayuda a ustedes, los que nos honran con sus silenciosas visitas, para que me obliguen a guardar silencio y me dejen algo de lo que la experiencia les ha enseñado.

El tema es aquel que le da título a este post. Para quienes no vieron la película, la buena noticia es que no es necesario verla. Basta con haber vivido. Basta con haber intentado alguna vez, tener una relación que pase de un par de semanas. Hablando con mis amigas, a veces siento que doy consejos como si lo supiera todo, pero la verdad es que todas estamos igual de perdidas en esto del cierre del negocio.

Y no es que quiera quedarme o dejar a mis amigas con la primera relación que se topan en el camino, es que pareciera que somos buenas en las primeras etapas de la venta: La generación de demanda, el primer contacto, casi hasta el acuerdo verbal... pero cuando hay que confirmar que existe una relación (y que conste que me aislo de las palabras noviazgo, matrimonio y todos sus etcéteras) nuestro rate de conversión es un asco.

Entonces, dado que no sabemos exactamente lo que hay que hacer, propongamos una revisión utilizando la ingeniería en reversa: Qué demonios es lo que no debemos hacer?

Por ahí Flachi soltó un par de ejemplos: Decirle novio antes de tiempo o confesar que se le quiere a la segunda salida... pero me parece que en los ojos que leen esto hay más sabiduría que en los dedos que lo escriben, asi es que, apelo a su ayuda.

Mi pregunta es simple:¿ Qué es lo que evita que el hombre se quede a pasar de un encuentro casual a una relación real?.

Vamos, seguramente tú que leiste esto hasta el final tienes un par de ideas... entra a los comentarios y comparte con nosotros eso que tu has aprendido. Si lo haces, ayudarás a un grupo de mujeres a ser más felices y las mujeres felices hacen al mundo un lugar mejor.


:D

jueves, 3 de septiembre de 2009

"Todo lo que necesito"

Hola, yo soy Lady Di, otra de las autoras del blog. Soy ecuatoriana, pero con un corazon de ciudadana mundial que reside en Buenos Aires. Soy una joven profesional que vino a esta ciudad a realizar un MBA, que dejo a su familia y a su entorno para comenzar aca desde cero. Estos dos años y medio para mi me han dado mucho pero tambien me hicieron pasar por momentos dificiles que en mas de una ocasion me hicieron pensar en volver a casa. Por que dejar la comida caliente recien hecha por mama? La ropa limpia? ¿El calor de hogar y la seguridad que te brinda estar rodeada de tus seres queridos?

Muchas veces la gente me ha preguntado cual fue mi razon para cambiar todo eso por vivir sola en un apartamento, hacer nuevos amigos, buscar laburo y tratar de encajar en una sociedad muy distinta a la mia y cargar con todas las consecuencias que eso trae. Pocos le encuentran un verdadero sentido a esta decision porque es dificil concebir la idea de dejar ese confort.

Creo que habrian muchas respuestas a esa pregunta, pero he llegado a la conclusión que solo existe una que encierre a todas las posibles: Descubrirme como soy realmente, como mujer, como profesional, como amiga. Parece mentira que esta experiencia pudiera ampliarse hasta el punto de verme como lo que soy y lo que podria llegar a ser.

Y durante este camino que para mi ha sido mas que crucial en mi desarrollo, decidi romper esquemas mentales (los cuales ya venian incorporados en mi chip) e ir mas alla y ser una exploradora de la vida. Son innumerables las vivencias durante mi estadia y lo que he podido ver y oir. Ademas no solo ha sido mi crecimiento, sino mi enriquecimiento al lado de hermosos seres humanos que me ayudaron en este dificl reto, amigas que no solo quiero sino que admiro y que han aportado con sus sanos consejos y su apoyo en todo momento. Gracias a todas ellas, porque me han hecho una mejor Diana.

Claro como no todo es lindo, mis defectos tambien me acompañan a donde voy, hay q trabajarlos, pulirlos y siempre resaltar las virtudes, lo positivo al frente.

Durante mucho tiempo veia el horizonte gris (como todos en algun momento sentimos) y temia que tuviera que regresar a mi punto de partida . Pero como dicen sabiamente “Dios cierra la puerta pero abre una ventana” ahora formo parte de una compañía multinacional que me recibió y es donde estoy apuntando mi futuro profesional.

Ahora que ya saben un poco mas de mi, porque quiero un marido que me mantenga? Parece ironico y hasta contradictorio que una mujer que lo dejó todo y que se bate sola ante la vida crea necesitar a alguien a su lado? ¿Es ésto ir en contra de un concepto de autosuficiencia?

Si, acepto ser una mujer independiente pero que quiere un marido y aclaro que no son ideas antagonicas necesariamente. Nuestra vida profesional y el desarrollo dentro de una empresa o tener un emprendimiento propio son caracteristicas tecnicas de una mujer y que nos brindan un medio para construir parte de nuestra felicidad que es el dinero, y si todo sale bien el reconocimiento personal para lo que hemos luchado.

Pero el ser humano fue pensado para vivir en comunidad y tambien para estar en pareja, y a pesar de lo que todas digan, la necesidad de que alguien nos acompañe en el camino es latente. Ni tus padres, ni tus hermanos o amigos esta en la capacidad de brindarte este tipo de afecto.

Estoy consciente de todo lo que soy, pero tambien de lo que me hace falta y de lo que tengo para ofrecer. Se cuáles son mis necesidades y mis debilidades. Soy débil ante un intento de cariño sincero, ante un hombre que me promete compartir conmigo lo cotidiano y que estaría dispuesto a sostenerme cuando voy a desfallecer. Soy débil ante detalles, ante caricias y palabras dulces. Porque soy consciente de ello, he encontrado en este blog la manera de expresar lo que siento y lo que pienso con ustedes, y mas interesante aun con mujeres tan admirables como valiosas, con diferentes puntos de vista pero que me hacen mirar la vida a traves de otros ojos.

El famoso “Principe Azul” como todas lo conocemos y que siempre se escucha lejano, no es mas que un simple mortal a quien vamos a querer con sus virtudes y defectos y que caminara con nosotros. No necesita de etiquetas ni instituciones, solo la seguridad de que esta ahi junto a nosotras, que nos ama por la mujer que somos y la que podremos llegar a ser, que nos completa a pesar de que los años no nos hagan mas lindas.

Por eso quiero un marido que me mantenga, que me mantenga junto a sus logros, sus derrotas, su malhumor, su tristeza pero cuando los momentos de felicidad lleguen tambien podramos celebrar juntos la aventura de la vida.

martes, 1 de septiembre de 2009

No gana quien tiene mas ganas, no sé si me explico...

Hace ya algunos meses que arrancamos este blog como una iniciativa de un grupo de amigas (y un hombre, seducido por el concepto pero que aún no vence la timidez para darle al teclado) que querían compartir un poco entre ellas y un poco con el mundo, algo de sus dudas, pensamientos y experiencias en su búsqueda de la realización personal.

Si has pasado por acá más de una vez, te habrás dado cuenta de que somos personas en momentos de la vida y con perspectivas y puntos de vista muy diferentes y creo que eso es lo que hace que valga la pena el esfuerzo. Es divertido ver como algunas de quienes acá publican encuentran en el título del blog (qumqmm) una seria provocación hacia sus puntos de vista, otras lo ven como una forma de confesión pública, yo personalmente creo que yo... no, espera... permíteme presentarme.

Yo soy DiY. Mi perfil completo está a la derecha de la página y si venís referenciada de Facebook, no necesitas mas presentación. Este blog ha sido muchas cosas para mi en estos meses: un pasatiempo, una forma de disciplina para sentarme de nuevo frente a la compu a hacer otra cosa que navegar sin rumbo, una confesión, una rebelión y, si.. un poco una burla.

No me malinterpretes, quiero un marido que me mantenga. Y lo quiero por varias razones. Lo quiero por lo mucho que creo en mí y por lo mucho que me quiero. Creo que una mujer inteligente y capaz con una mente creativa y revoltosa debería tener alguien con quien compartir esos pensamientos extraños y revolucionarios que sólo llegan a su cabeza mientras sonríe mirando al techo después de hacer el amor. Quiero un hombre que lo comparta.

Quiero un marido que me mantenga por que creo que soy fuerte, valiente y atrevida, pero también por que entiendo que soy humana y me canso. Por que hay momentos en que me gustaría echarme hacia atrás y saber que ahí hay alguien que me sostiene. Busco a ese hombre que me respalde.

Soy mujer y como tal, soy también contradicción. Así que inteligente, dura, valiente, pero extremamente sensible y vulnerable. Sueño y me caigo con facilidad de los sueños... quiero un marido que me levante. Me gusta mi soledad y mi independencia. Me gustan mis momentos en silencio y quizás.. me gustan demasiado. Quiero un amor que me acompañe.

Quiero decir muy en alto que quiero un marido que me mantenga, por que es mi forma de decir que no me importa lo que se piense de mi. Que soy libre y liberada. Que soy tan libre que puedo decirlo y que me libero ante una liberación que me impone independencia.

Pero por sobre todas las cosas quiero hacerlo distinto. Quiero saber que aprendí de las mil veces que me topé con la pared. Quiero saber que crecí. Y por eso, detengo aquí mi lista de "quieros".

Empecé con una canción y me despido con otra. Por que creo que he aprendido que no basta con "querer". Creo que en esta vida se recibe como se da. Y yo... tengo también un corazón que se muere por dar amor.


Gracias Juanes, Gracias Alejandro Sanz por las colaboraciones involuntarias.

viernes, 28 de agosto de 2009

En otro lugar

No sé que traigo hoy, pero como que me come la necesidad de compartir un sentimiento personal, muy reciente y "surprisingly upbeat!" (uso las comillas para citar a una de las colaboradoras de Composure Magazine, en el adorable chick flick How to loose a guy in 10 days -guilty pleasure number 3- ). Antes, permítaseme un breve párrafo con atecedentes, en caso de que esta entrada llegue a caer en ojos de alguien que no sabe sobre mi.

Hace dos años y un poco más, me dió por sacar tímidamente mi raíz del suelo que me vió crecer, para moverme a una ciudad un poco lejos de la mía, con una cultura un poco distinta a la mía. Entendiendo el trasplante como una aventura, emprendí mi nueva vida emocionada, un poco aterrada y con plena idea de estar haciendo exactamente lo que quería hacer (as usual). Dejé de trabajar y viví de mis fondos de retiro por dos años en los que me dediqué a estudiar y a gozar de una ciudad indescriptiblemente especial, llena de furia, de humo, de puteadas, de sonrisas y de gente muy especial.

Hoy observo con desencanto el estado de mi cuenta bancaria y enfrento la triste de realidad de no haber logrado encontrar una oportunidad laboral que me permitiera permanecer en esta parte del hemisferio, precisamente en estas latitudes. El tema es que me toca volver a mi ciudad y hasta hace unos días, esa no era una idea feliz.

Sin embargo,en esta semana he tenido un reality check importante: Vinieron de visita dos amigas de mi tierra, amigas entrañables y adoradas, que me trajeron memorias de mi y fueron esas memorias las que me ayudaron a entender... ojalá pueda expresarlo claramente....

Creo que mi miedo fundamental a volver se basa en lo que yo era antes de venir y no en el lugar físico. Es decir, me parece que no se trata de que yo no quiera volver a México, sino que no quiero volver a ser como era, antes de esta aventura.

Y no es que la persona que yo era hace dos años (casi 3) sea malo, al contrario. Me siento orgullosa de lo que he sido a lo largo de mi vida; pero hay cosas de la ciudad que a uno lo distraen de lo escencial. Un comentario de una de mis amigas me decía: "es que acá, puedes trabajar de lo que sea, el tema es que si vuelves a México, allá hay como un status que cuidar y con el que tienes que cumplir, sobre dónde trabajar y cómo vivir".... .... ... Escucharlo fué agua que lavó mis dudas. Puso mis miedos en blanco y negro y por escrito. Fué un instante perfecto.

Mi apego a esta ciudad se debe, sin duda, a lo grande de la gente que he encontrado. Se debe a ellos y a ella misma, que es tan hermosa, impredecible y temperamental como yo requiero que sea una ciudad en la que vivo. Pero mi desgano por volver a mi ciudad, no era desgano real. Era miedo. Miedo a volver a ser susceptible de ser medida por un status con el que debo cumplir. Miedo de que me importe de nuevo.

Hoy, al razonar mis miedos, encontré mi paz. Es imposible que yo vuelva a ser lo que era antes de aprender todo lo que aprendí de la gente acá y de acá. Puedo volver a la ciudad de México tranquila por que hoy, independientemente de las latitudes que rijan mi espacio físico, yo... yo estoy en otro lugar. No mejor ni peor, sólo distinto. Un lugar desde donde entiendo las cosas igual, pero me importan distinto. Hoy soy una persona que valora más a su familia, a sus amigos, a sus caminares y a su perro. Me moví de lugar.

Es desde ese lugar que hoy emprendo mi camino de regreso con curiosidad y ánimo de ver hacia dónde es el siguiente paso. Espero que sea hacia otro camino de aprendizaje. Espero que me lleve un paso más cerca de un marido que me mantenga.

Ja!

miércoles, 26 de agosto de 2009

hablando de recuerdos

esta mañana salude a mi querida amiga y me preguntó como nos va en el 3er año de la educación básica y es que soy la orgullosa mamá de un pequeño que recien cursa este grado escolar.
Hablando de tan bella época empezamos a recordar nuestros mejores años de la infancia y de nuestro paso por la primaria. No me atrevo a comentar sobre el mejor año de alguien más pues lo dejo abierto a sus comentarios; sin embargo si puedo hablar de mi mejor año y ese fué el 4to grado.
El 4to no se distingue por ser un año cómodo ni mucho menos además estamos en el sandwich pues ya no somos los chiquitos ni tampoco los grandotes y somos la presa fácil de los de 5to que desquitan sus frustraciones remarcadas por los del 6to grado con nosotros, claro sin tomar en cuenta que es un año de mucho aprendizaje, nuestro primer enfrentamiento con la raíz cuadrada y siiiiii esos enemigos naturales empiezan a adquirir un atractivo insospechado, ya no son tan tontos y ya empiezan a verse bien.
Aquí pues mi experiencia, en realidad debo en gran parte a una excelente maestra el guardar tan gratos recuerdos de ese grado y no era una maestra de esas consecuentes, una maestra realmente estricta, el coco de varios, ahi ya se habian atorado varios de mis nuevos compañeros; pero eso si, una maestra con una vocación inigualable, interesada porque aprendieramos, porque entendieramos y decidieramos, lejos de solo aprender por repetición. Ese año también conoci a mi primer amor en la persona del profesor de 6to grado (si, mi defecto es que me encantan los mayorcitos pero mis fracasos se han dado con los peques o iguales, quizá esa sea una señal...)
Ese año me enfrente con la niña que tenía aterrada a la escuela entera, una niña 4 años mayor que yo y brava, muy brava; cuando digo escuela entera me refiero a ambos sexos. Ya saben Ana era esa niña lider mala onda que tenia a su alredor un par de remoras que aprovechaban su poderio y a la que un buen día ose no dejar meterse a la fila de la tienda cooperativa. Su primera reacción fue reirse de mi y tirar de mis preciosas trenzas negras, yo no era una niña alta en ese entonces y si tenia que verla hacia arriba pero aun asi la empuje y le dije que no se metiera conmigo y como en pelicula gringa se hizo una rueda alrededor: use pies, uñas, manos y todo de lo que pude valerme el resultado fue un tremendo morete cerca de la boca, un par de trenzas deshechas, brazos y mejillas rasguñadas pero ni una gota de agua salió de mis ojos. Ana no se fué libre pero definitivamente se impuso el tamaño y fuerza. Ah cómo nos hemos reido Anita y yo de esa pelea, si nos hemos reido pues estas cosas de la vida, de mis compañeros de esas épocas solo frecuento a 2 personas y una de esas personas es Ana quien por cierto es bastante bajita de estatura jejeje deberíamos de enfrentarnos ahora en estas condiciones.
Claro que me hice de un nombre y de cierto respeto en la escuela y creo que un par de admiradores a quienes nunca hice caso grrr! (no eran competencia para mi profesor).
Ese año también tome la decisión de dejar la medicina para dedicarme a la ingeniería y me convertí en fan de grupos musicales tales como Queen.
En fin, espero haber motivado una distracción en ustedes y quiza la añoranza por aquellos años en los que no teniamos y seguramente tampoco buscabamos un marido que nos mantuviera, lo teniamos todo gracias a otro hombre, uno que era el marido que mantenia a esa señora de nombre mamá

domingo, 23 de agosto de 2009

Me volvió a suceder…

Resulta ser que hice caso omiso a los consejos de mi gurú mexicana, y no solo, no aplique “The Rules”, sino que me tire con ropa y todo a la pileta sin siquiera ver si había agua. Una vez más, no jugué “al cazador y la presa”, una vez más asuste a un hombrecito que me encantaba. Y lejísimos quede del marido que me mantenga!! Ja!
Independientemente de aquellas cosas, que se ve, aun no aprendo, esta vez hay algo para destacar. El, puso lo que hay que poner, me sentó y me lo dijo! Guau!
No se si hubiera sido mejor que huyera sin explicaciones (como lo hicieron otros) por que al menos así podría culparlo por desaparecer! Es que de este modo, me lo torno más valioso (a él) y más complicado el panorama para mí.
Por que digo esto…cuando a una la sientan y le dicen, “yo recién estoy abriendo la puerta y vos la estas empujando del otro lado” siempre me viene la misma pregunta a la cabeza…para mi fue fácil entregarme por completo ¿Por qué yo soy así, y él no? … O me abrí… ¿por que el me gustaba mucho? ¿Y yo a él no le gusto lo suficiente?, o definitivamente las cosas no fluyeron, por que como dice la canción “Ella dijo, y yo dije, no es mi amor…” Podrían ustedes ayudarme con este tema y opinar, por favor… a él no puedo preguntarle, por que a pesar de lo que me dijo, y de que yo “le interesaba y blabla”, termino huyendo como otros…Ja!

martes, 11 de agosto de 2009

Definitivamente no buscamos lo mismo

Cuando tenía edad de preescolar, me gustaba jugar con las muñecas a “la mamá y el papá”. Mientras que los nenes de mí salita de jardín, parecían disfrutar más con los autitos y las carreras de velocidad. Dada esta circunstancia, ¿Por qué me sorprendo hoy al ver que las mujeres queremos formar una familia, y los hombres cambiar el coche o ver fórmula 1 en la tele?
No debería de extrañar a nadie entonces esta circunstancia. Podemos echarle la culpa a nuestra educación? Al temible mandato social? Quien se hace cargo de esto que tantos problemas y desencuentros genera? Fruto de una charla reciente que tuve con un amigo (hombre, bien hombre!) sobre este tema, el me decía que no es así como yo lo expongo, por que según él, hoy las mujeres “jugamos a la par de ellos”. Mucho tiene que ver, la independencia económica que hemos sabido conseguir, de hecho, hoy somos capaces hasta de verter frases del tipo “si no te gusta te vas” (y en esto tiene razón…)
Pero para mí no es del todo cierto. Y les explico en que me apoyo, para opinar así, estamos “formados” de distinto modo. Segmentados, por género. Nos dan el rosa, a los hombres el azul, nos tienen que abrir la puerta (en el mejor de los casos) y hasta cedernos el asiento!! Y específicamente en temas de parejas, no es extraño ver como ante un conflicto, una mujer expone sus sentimientos en la mesa y es capaz hasta de sentir frío por desnudar el alma, mientras que los hombres ante la misma situación, se contraen, se llaman a silencio, y dejan elegantemente que pase la ola, con el justificativo de “no me gusta confrontar”. Y como no va a ser así, si de chico al hombre le decían “llorar es de maricones, vos tenes que ser un macho”, (o lo que es peor) “eso es cosa de nenas” y si!! Exponer los sentimientos indefectiblemente, es y será cosa de nenas!!
Ya sea que busquemos el amor, o un marido que nos mantenga (mucha suerte sería reunir los dos en uno), este que acabo de mencionar, creo que es un detalle no menor a tener en cuenta. Nada es imposible, claro está y hasta “Jack, el destripador” puede redimirse, pero si te ocurre que esperabas su respuesta o su llamado y no llego de la forma que querías, no lo juzgues, pensá en lo que te acabo de decir y enseñale a quererte.

domingo, 9 de agosto de 2009

The female parrot's shell!!!!!!

.... a veces, simplemente me pierdo en la traducción, y últimamente me pasa muy seguido: Escucho conversaciones, hablo, leo, chateo...observo... y siento que me perdí en la película, o no le entiendo, o ya la vi y por eso me siento como me siento.

Ayer usaba frases como "fuera de lo común" para describirme, quizás tratando de escapar un poco del adjetivo "rara" que siempre me cuelgan. "Fuera de lo común" suena más sofisticado, con más potencial y no suena tan emparentado con lo feo. Lo llame como lo llame, me parece que esa cualidad de fueradelocomun o rara, es lo que de pronto me hace sentir el deseo de sentarme a comer palomitas y ver la peli... aunque me pierda a veces.

Y así me siento, comiendo palomitas en un cine obscuro, mientras miro a mis amigas, colegas y conocidas, discernir sobre las estrategias, los fines y los alcances potenciales del amor, mientras me confundo con los mismos términos que se utilizan en estos análisis; términos como: romance, enamoramiento, amor, pareja, corazones (todos rojos), siempre, nunca...

Me apoyo en un fragmento de los textos inéditos de Cortázar, donde habla de una ponencia que no preparó sobre el "tema 5.4; el creador y la formación del público". Permítanme robarle a ese inigualable argentino, una conjunción de palabras que es tan extraña como perfecta en la expresión de significado: Higiene de las palabras.

Y es que me parece buena idea eso de lavar bien las palabras (y algunas ponerlas a hervir o desinfectarlas con lavandina) antes de hacer uso de ellas. Me parece que algunas están tan usadas y han pasado por tantas manos, biromes, lapiceras, papeles, paredes, libros, lenguas y ojos, que vayan ustedes a saber cuántas impurezas traen consigo. Dejemos que se remojen un rato antes de meterlas a nuestra boca o a nuestros ojos.... En unos minutos vuelvo por ellas.

Mientras tanto, vuelvo a mi butaca del cine y me percibo como un mero espectador en estas discusiones que veo y escucho entre mis círculos cercanos, aunque me creo un espectador bien cargado de opiniones, a veces siento que estoy taaaan fuera de los temas o de mi entendimiento de los temas, que prefiero simplemente escribir en un blog.

Amor, palabra recién lavada y desinfectada, es un tema tan puro, tan hermoso, tan indigno de ser definido, etiquetado o simbolizado. Yo escucho del amor que se siente en meses, y pienso en el amor que se lucha y se consigue con años de trabajo conjunto, con construcción de caminos, con experiencias, con dolores y lágrimas, con sueños sonrientes, con despertares malhumorados. Amor que nace de diálogo y discusión, de entendimiento, de tolerancia. Después de una buena higiene, eso es lo que a mí me queda de amor; lo demás, es enamoramiento, romance o cuentos de hadas.

Desde mi butaca, sea porque ya vi la peli o porque no le entiendo; yo sueño con eso pero empiezo por menos: quiero un marido que me mantenga!


Ja!

jueves, 6 de agosto de 2009

It must have been love…

Ayúdenme suponiendo que una mujer llega al extremo en que se reconoce “enamorada”.
Vale decir, que confluyen en ella, todas las condiciones típicas de “enamoramiento” (léase mariposas en la panza, regalos y cosas que ni siquiera hubiéramos imaginado que alguna vez haríamos, mismo lugar, misma hora “por si lo vemos venir”, papeles escritos con “su” nombre por doquier, muchos corazones, por todos lados y todos rojos).
Y luego sin más esa situación desafortunadamente se termina. Nos atropello la vida, un tercero, la rutina, por el motivo que fuera, el hecho es que, eso que a ella la ahogaba de felicidad, se termino. Llego a su fin.
¿Cabe la posibilidad que este amor se termine alguna vez?, ¿o mientras lo sigamos pensando lo extrañaremos? ¿se aprende a vivir con ese recuerdo? ¿o podrá ser que efectivamente a pesar de haber sentido amor, el tiempo lo cura todo?
De solo releer las preguntas, lanzo al aire un suspiro (o tal vez sea Roxette como música de fondo que me esta jugando una mala pasada…) O no!!!, tal vez pensé en él, lo recordé y por eso suspire… lo que me hace volver al punto inicial. Si fuera cierto que no se puede olvidar, por que es como otro hecho en la vida, algo que transcurriste y te dejo una marca, pues entonces voy pidiendo mas ayuda por que amores como el que sentí aquella vez, ya tengo dos en mi haber!! Y difícil entonces será seguir viviendo con tremendo hueco en el alma.
No se por que creo que el análisis debe rayar por disfrutar de lo vivido, sin que llegue a sentirse nuevamente tan vivo como para que duela. Por supuesto esta no es una conclusión a la se pueda arribar fácilmente. Uno tiene que hacerse a la idea de que “si no fue, por algo será”, aunque esa frase sea un poco injusta, por lo que dicen de ella “mal de muchos, consuelo de tontos”. Pero pensándolo bien, tal vez sea así, y vale aclarar que solo en aquel momento fui tonta y por que te entregué todo (y me olvide de preguntarte si lo querías), pero hoy crecí y ya lo puedo ver con muchísima mas claridad, eso que viví debió haber sido amor…sin dudas!!
Que hermoso recordar, haber sentido alguna vez, algo así !!! Gracias a Ti, de mi!! Y adiós!!

miércoles, 5 de agosto de 2009

Todo amor? o que?

Situación: sabado frio por la noche. Barrio Palermo, bar de moda.Dos amigas, charlando de la vida entre tragos y rubios que las seducen…El calor de la gente, la musica, las invitan a relacionarse con otras personas, escuchar ideas, propuestas, invitaciones.Y los temas siguen saliendo….pero con el pasar de las horas se van profundizando, y hasta quizas sensibilizandose….(quizas por los efectos del alcohol...quien sabe...)El amor, las ilusiones, las desilusiones, la admiración, el desencanto…y mil palabras que nos trasladan a las experiencias que vivimos…Hasta que una de ellas llega a una pregunta de esas que nos salen solo a nosotras....:“al final cual es el amor verdadero? Ese que no te deja respirar, te supera, no sabes como sentir todo lo que sentis…..pero que sabes que no te conduce a tus proyectos de pareja y a que a la larga puede llegar a frustrarte,…o esa persona que te complementa perfectamente, que es tu compañero ideal, con el que compartís todo lo que siempre quisiste con alguien….pero que lo que sentís es mucho pero no tanto como lo descripto en el caso anterior??????” Porque cuando ella piensa en los sentimientos de su historia de amor, se le sensibilizan las emociones, pero sabe que no es y no va a poder ser nunca.Sigue adelante, y vive experiencias del 2do caso. Y piensa...Comienza a preguntarse, que es lo que realmente le llena el alma y si existe el equilibrio del amor y el complementoideal entre dos personas, donde se le aprieta el corazon con su presencia, sonrie cuando esta sola y piensa en el, y al mismo tiempo el compartir de cada dia se traduce en paz, en sentir que se esta con la persona indicada y en el momento correcto.Que dificil responderlo no?De todas maneras, todas estas preguntas no cortan la inspiracion de la noche, de pasar un buen momento de amigas, sino por el contrario, se desata un desafio, que es encontrarlo....a el...al marido que nos de todo, amor, felicidad, contension, compañerismo...pero que por sobre todas las cosas....que nos mantenga! ja

martes, 21 de julio de 2009

Efecto “Tierra tragame ya”

Hoy fue un día de lluvia muy intensa, uno de esos días que inspirarían incluso a “Jack, el destripador” a escribir unas líneas. Pero lejos de cualquier situación de “mariposas en la panza” (por que estaba en el horario de almuerzo de mi jornada laboral y nada me motiva menos que eso) a mi mente vino una pregunta muy particular, y es la siguiente: ¿Por qué una mujer, en la semana 2 o 3 –de estar conociendo a alguien- es capaz de “meter la pata” con tanta facilidad, diciendo expresiones impropias al momento de la relación y frente a …“él”…? (lo que no es un detalle menor).
Para que no les queden dudas de, a que me refiero, les amplio con las siguientes descripciones:
Caso de estudio 1) El y ella, en una charla telefónica, común e inocente, llegan al punto en que él le confiesa que estaba metido en una situación que podía resultarles adversa para ambos, dado que a causa del destino, él, ese día, no tenía agua, y no iba a poder bañarse antes de ir a verla. A lo que ella muy locuaz, le responde: “no importa se le QUIERE igual” (Dios nooo!!! Que acabo de decir!!! Solo le faltaba agregarle “mi amor” y era una declaración completa).
Pero eso no es todo, vayamos al …
Caso de estudio 2) El y ella, en un living-comedor (que podía ser de cualquiera de los dos), bromeando respecto al hecho de que ella, le queda justo a la altura de los brazos de él y por ello él puede abrazarla mejor, toda esta escena transcurriendo con frescura y sana cotidianeidad, hasta que ella con una seguridad implacable lanza al espacio común: -“Viste, tu tienes una NOVIA perfecta ya te lo decía yo” (nuuuu, hundida peor que el Titanic!!!! Por que lo dijo?? Por que le salió con esas palabras?? Por que? Por que? Y mil veces por que?).
Si bien no tengo claro aun el “por que sucede”, de lo que si estoy convencida, es de que sendas contestaciones, aunque salieron con tono de chiste, fueron literalmente escupidas desde el centro mismo del corazón!! Y esto se los podría casi confirmar (por que fui yo, quien cometió unos de los exabruptos en cuestión, de hecho cargo con haber dicho el primero, el segundo gracias a Dios, aun no!!).
Sinceramente creo que “de tonto y de loco, todos tenemos un poco”, pero me inquieta saber ¿que nivel de traición maneja nuestro inconsciente?¿hasta donde piensa sumergirnos?. Y claro, me digo! pues él, no tiene que asumir luego las consecuencias de un corazón roto!! Por que quienes saben mucho del tema, aseguran que frases así a la segunda semana, nunca jamás, te acercaran a tu ser querido y mucho menos si lo deseas a un marido que te mantenga!!.
En definitiva, luego de exponerles estos casos de estudio, me obligue a analizarlos y estoy en condiciones de hacerles un boceto de cómo ocurren para mi, estos “desafortunados” hechos.
Nuestro corazón siente, el subconsciente lo lee, y ahí enseguidita viene este último, jugándonos una muy mala (malísima) pasada, tomando las riendas de nuestro propio ser y decir y nos hace lanzar expresiones al cosmos, que de seguro hubiéramos preferido disimular (al menos en un comienzo). La frutilla del postre, titulo de la nota, es ese fuego interno que se siente cuando uno entra en razón. Ese segundo de Eureka, en que nos damos cuenta que aquello que acabamos de decir, es directamente proporcional, al final de algo, que casi no había comenzado aun. Por Dios! “Tierra trágame” y que sea pronto, por favor.
Desafío a quienes lean esto, a que me digan que nunca les a pasado algo similar!! Vamos!! que no podemos ser las únicas dos mujeres en el planeta, que han pasado por terrible brete!! Cuenten sus experiencias, digan por que creen que sucede, y por favor sírvanse aportar ideas para salir airosas de algo semejante, dado que podría afirmar que no será la última vez que esto ocurra.

jueves, 16 de julio de 2009

“Sex and the City”

Anoche tuve una cena a la que prácticamente no le falto nada…
Hubo un buen vino tinto, asado, ricas papas fritas, ensalada y 3 amigas formidables. Esta cita se dio en un glamoroso resto de Palermo. Casi que por momentos me creí Charlotte York, en la serie “Sex and the City” (esta de más decir que no califico como Carrie Bradshaw, ni como Miranda, menos como Samantha!! (Y Charlotte en su etapa de soltera esta bien para mi).
Mis buenas tres amigas trataban de hacerme entender que era esto de: “The rules”; que al parecer es un libro muy reconocido (disculpen mi ignorancia) donde publican 10 máximas para retener al hombre exactamente interesado (como lo deseamos) a tu lado –al menos esa fue la lectura que me lleve de sus comentarios-.
Tuve el gusto de compartir la cena con una colega de equipo de este blog, quien generosamente trato de hacerme entender que la aplicación a “rajatabla” de estas reglas, no es eterna (estoy en problemas si así fuera) y me explicaba que es un juego inicial, es decir hasta que dos personas se conocen definitivamente.
Si queremos un marido verdaderamente interesado en nosotras -y que tal vez en un futuro nos mantenga-, deberíamos a los comienzos de la relación (según mandan “las reglas”) aparecer y desaparecer, es decir, buscar denodadamente que el hombre muestre un movimiento similar al del “hombre que rema” cuando algo le interesa. Esto sería con el objeto de darle espacio, de dejarnos “cazar”. Hasta que esto no este verificado empíricamente no podremos entregarnos por completo y hacer caso omiso a “las reglas”. Mientras tanto debemos aferrarnos a ellas cual “la neta” ("verdad revelada", para los no chilangos).
Esto me llevo a la siguiente reflexión; “Homo”, es un género que incluye a los seres humanos que somos hoy y a nuestros muy lejanos y extintos parientes. De hecho el único contemporáneo a nosotros es el Homo Sapiens. Este último homo, el “hombre que piensa” no fue el primero, hubo varios antes, por lo que asumo, que en la primer versión de hombre/mujer solo estaba desarrollado el instinto a sentir, a mantenerse vivo y luego algo en él se fue perfeccionando y vino el famoso “sapiens”. Ese que puede discernir. ¿A que voy con esto?... si históricamente ya tenemos confirmado que en el hombre primero se desarrollo la “emoción” y luego recién la capacidad de “analizarlas” como quieren hacerme entender a mi … (muy limitada homo sapiens) que inicialmente debo “pensar” y luego debo “sentir”.
¿Ustedes que opinan?...

lunes, 13 de julio de 2009

Me mantendrías por siempre?

Este mensaje es para vos que no lees este blog y es tambien para quienes lo leen y les interesa compartir mi solicitud. Permitan que hoy escriba en segunda persona, es importante que el universo la reciba así y quizás, en una de esas, logre algún tipo de respuesta cósmica.

La palabra Siempre es sin duda una palabra grande. En general, en términos de relaciones, "siempre" me provoca comezón... será por que los amorosos "siempre" se están yendo?... Igual, entre siempres y nuncas, me detengo para pedírtelo así: Me mantendrías por siempre? y para aclarlo un poco más (antes de que me acusen de espantanovios), me mantendrías por siempre así?

Mantenme feliz, mantenme cantando en la mañana de lunes, mantenme ilusionada, mantenme cursi, mantenme tan sobrecargada de emoción que mis ojos no paren de llorar. Mantenme así... por siempre.

viernes, 10 de julio de 2009

No...definitivamente...no quiero…
Dicen que en la diversidad esta el gusto…
Por ello me permito desde mi primer escrito, ir en disidencia con algunas colegas del equipo.
Aunque tal vez, mi opinión, no se trate de una contradicción absoluta, sino de otro punto de vista.
A la pregunta, “ ¿usted quiere un marido que la mantenga?”, mi respuesta inicial sería: -“en esos términos, NO, nunca.”
No puedo dejar de asociar la palabra “mantener” a lo que han hecho mis padres conmigo durante mi infancia, o mi adolescencia. Mantener para mi es sinónimo de “te mantengo económicamente, y dependerás de mi, en tanto eso dure” .
Por eso es que no quiero un marido que me mantenga de ese modo, es más, la sola idea, me causa irritación.
Lo que si quiero y busco cada día, desde que me levanto, hasta que me duermo (incluso a veces aun en sueños) es un compañero que me ame, con todo lo que ello significa, un compañero que me contenga, un compañero con el que nos completemos emocional y espiritualmente, un compañero con el cual pueda compartir mis deseos, mis ilusiones, la vida.
Y cabe aclarar, que solo si los condicionamientos del contexto cultural me acorralan, lo llamaré “marido”, sino será llamado “amor mío” eternamente, y nunca “marido”!!

miércoles, 1 de julio de 2009

de manutenciòn y otros menesteres

Mira que sé del tema, un largo y pesado divorcio y una pelea durísima por el régimen de convivencia creo que me dan la autoridad para hablar del tema.

Quiero iniciar mi participación con la descripción de la real academia de lo que significa la palabra “manutención”.

Manutención. (De manutener)

1. Acción o efecto de mantener o mantenerse

2. Conjunto de operaciones de almacenaje, manipulación y aprovisionamiento de piezas, mercancías, etc.

3. Conservación y amparo.

La que me gusta más es la tercera…. Conservación y amparo. Quienes son candidatos de amparo? Seguramente dos tipos de personas: las que lo necesitan y las que no lo necesitan

En el primer grupo se encuentran los menores, los desvalidos, los ancianos muuuuuuuy ancianos, los animales (aquí entra perfecto la palabra conservación) y un par de etcéteras más que en este momento se me van….

En el segundo grupo se encuentran las personas que son productivas, millonarias, artistas e intelectuales pertenecen a este grupo.

Y creo que aquí va la carnita del asunto…. Se vale!, por supuesto que se vale querer que alguien nos ame, nos de protección, nos de amparo y nos haga sentir que podemos luchar contra el mundo bajo el escudo protector de un financiamiento “seguro”

El mundo ideal está lleno de esos príncipes y quizá 2 o 3 se escaparon de la Tierra de la Fantasía para hacer sumamente felices a 2 o 3 privilegiadas, que obviamente no somos ni tù ni yo.

Lo que es real, es que en esta vida siempre hay un balance, a veces ese balance es medio truculento y se parece más a un sabotaje pero esto es medio karmatico.

El perfecto equilibrio se da, incluso en la manutención. Y para conseguir financiamiento hay que retribuir al mismo, descartando (a veces) al grupo de los que lo necesitan, siempre tienes que dar algo a cambio…. Algunas veces esa transacción hasta la realizamos gustosas pero a veces invade tu individualidad, tu poder de decisión, tu libertad. Y es aquí en donde tenemos que estar previamente muy seguras de saber cuál es el precio y estar dispuestas a pagarlo, aún cuando no te des cuenta.

A estas alturas me he vuelto inasombrable, es más, cuando escucho en las noticias que fulanita firmo un contrato prenupcial hasta digo va, esa sí que piensa lo que hace. Yo creo que se vale, se vale querer que alguien nos mantenga, se vale sentirnos un poquito despreocupadas del día siguiente, se vale echar a volar el espíritu, sólo que hay que hacerlo con los pies en la Tierra y si no estás dispuesta a exponer tus ideales, creo que debes pensarlo más de 2 veces.

Hoy escuchaba en la radio el tema de matrimonio y la conductora defendía el hecho de hacer contratos de matrimonio caducables… suena evolucionado, no? Pero… y si los 2 involucrados no estamos en ese nivel de evolución?, qué onda con la renovación? Y si ya no quieren renovarte?

Bueno en mi cabecita empezaron a desarrollarse mil ideas y estas coincidieron con la conductora…. Lo lleve al plano empresarial, que pasa con una relación cliente proveedor? Si no la atiendes, la consientes, le cumples y por sobre todo la respetas, lo más probable es que el cliente no te renueve. Por el contrario si eres un cliente que no paga, que se queja de cualquier cosa, que es caprichoso y da problemas, a lo mejor es el proveedor quien decide no renovar el contrato. En fin, que es cosa de dos. Y si estas consciente de que matrimonio no significa vivieron felices por siempre y que el amor todo lo puede…. Creo que es una relación muy benéfica para ambos, que se renueva, que se conquista y que se fortalece día a día

El único amor incondicional es el que tienes por un hijo aunque aun en tu corazoncito esperes que se haga el próximo Tiger Woods y que te saque de pobre… pero no pasa nada si él decide sabiamente hacer su vida y dejarte a ti hacer la tuya.

lunes, 29 de junio de 2009

Ajustando expectativas

Considerando que no todo el mundo vive en el cono sur, permítanme comenzar por un breve comentario sobre el clima actual en Buenos Aires: Hace un frío de la... digamos que hace mucho frío. Para un alma chilanga como yo, con un cuerpo acostumbrado a un mundo templado sin temperaturas extremas, lleva un tiempo acostumbrarse a la llegada de este tipo de fríos. Por un mes o algo así, esta chaparrita mujer sale a la calle lo menos posible... y luego, ya está, me acostumbro y salgo. Este año, mi adecuación al frío fué acompañada de un ataque de influenza (que, al parecer, fue estacional y no la tan de moda H1N1). Durante todo este período de maravilloso encierro, me he dado tiempo para pensar en algunas cosas importantes y me encontré con un par de experiencias interesantes. Aquí una de ellas:

Tiene un par de meses que vivo en este departamento. Me gusta. Es un edificio viejo, que me hace pensar en cómo era Palermo cuando fué construido. Chiquito pero acogedor y misteriosamente caliente en temporada de frio, el depa me gusta y me siento bien acá. Al menos, me sentía hasta hace unas semanas que descubrí una tribu de visitantes indeseables. De esos que tienen nosécuantaspatasporquemeaterracontarlas, antenas laaargas, vuelan, son de color café/marrón y se llaman cucarachas. Así, en voz bajita por que no tolero ni siquiera nombrarlas.

Por alguna extraña razón, las ___ esas habían decidio vivir en el closet donde se guardan las cosas del aseo, lo cual me daba dos ventajas importantes: 1.Sabía donde estaban y 2.El área no era tan compleja de vaciar o de llenar con Raid Max.

Si no puedo ni siquiera nombrar a esos bichos, mucho menos pasó por mi cabeza la idea de vaciar el clóset y revisar todo su contenido hasta estar segura de que acabé con todas. En lugar de eso, me dediqué durante 5 días a vaciar un cuarto de bote de Raid Max y cerrar la puerta de inmediato. Al lunes siguiente, le pedí a la chica de la limpieza que hiciera eso que yo no me atrevía a hacer. Y vació el closet y al revisar los contenidos, encontró cadáveres de al menos 10 de esas cosas. Cada semana hace una revisión de control y parece que eran sólo esas.

El tema es que esta semana aparecieron de nuevo. Todos lo sabemos, es imposible terminar con ellas. Tristemente, esta vez escogieron un lugar un poco más complejo de tratar: mi habitación.

No puedo ni contar mis noches de insomio y la cantidad de pesadillas que se acumulan cuando logro dormir. Sueños Kafkianos sumamente aterradores, mientras no dejo de pensar que se pueden subir a mi cama... o que me las voy a encontrar cada vez que saco algo de ropa o al ponerme los zapatos. La vida en pesadilla.

Igual, soy una mujer fuerte que sobrevive. Y sobrevive más que unos bichos como esos. Si ellas no se murieron, yo tampoco me voy a morir. Y si, puede ser que mi vida sea una pesadilla, pero no me he muerto. He cambiado mis costumbres un poco. Alejé la cama de las paredes, reviso y levanto las sábanas antes de meterme a la cama, sacudo mi ropa antes de ponérmela, reviso que mis zapatos estén vacíos, doy golpecitos en la puerta antes de entrar o antes de abrir el clóset (así les doy tiempo de esconderse y ojos que no ven...). Y tengo sembrado veneno por todo el lugar, en caso de que, además de sobrevivientes, sean boudas y se lo coman.

Esta experiencia me hizo reflexionar sobre mis expectativas. Yo quiero un marido que me mantenga y me deje volar, uno que me dé seguridad y libertad, que apoye mi espíritu creativo y mi pasión por las compras... no sé, desde mi situación actual, estaría dispuesta a negociar. Puedo prescindir de un marido que me mantenga, si consigo uno que me quiera y mate las cucarachas.

Ja!!!!!

martes, 9 de junio de 2009

El Nuevo Marido Ideal

Son ya 2 años que me encuentro residiendo en Buenos Aires, más conocida como la Ciudad de la Furia, según la sabia melodía de Soda Stereo. Durante este tiempo, que no es poco, muchas cosas en mí han cambiado; comenzando desde el gran paso que fue dejar Ecuador y el nido familiar por comenzar una vida desde cero, donde yo sola debía buscar mi lugar. Sin duda, atravesé muchas complicaciones, viví momentos difíciles y todo gracias a no tener a "alguien" que se preocupe por mí y que cuide de mis sentimientos e "inversiones".

Ahora bien, las experiencias vividas me han hecho reflexionar sobre el "Marido Ideal" recomendado por mi madre, abuela, tías y demás parientes femeninos del círculo familiar lejano o cercano. Desde chica, mi madre decía que yo debía ser una mujer virtuosa para conseguir aquel hombre maravilloso que me está esperando y que Dios guarda para mí: un buen esposo, un buen padre que se preocupe por mi bienestar y de nuestra futura familia, etc, etc.

Todo muy lindo, la verdad bastante utópico, pero al final es lo que todas nuestras madres quieren, no? De mi grupo de amigas, todas entre los 27 y 28 anos siguieron este modelo familiar y están "felizmente casadas" en Guayaquil con 1 o 2 hijos, casa y el mascota Labrador corriendo por el jardín. "Felizmente casadas" sin duda, porque no se quedaron en la percha; pero económicamente hablando, atraviesan problemas gracias a la mencionada "crisis mundial" que a todos afecta. En ese momento es cuando reflexionaron y se dieron cuenta de que todas sus virtudes debieron ser mejor cotizadas dentro del mercado, lo que resume es "embarcarse con el mejor postor".

El día a día a Buenos Aires me hace pensar, ¿qué hay de la realidad económica de nosotras las profesionales solteras? Atrás quedó aquella frase de la abuela, "todo hijo viene con un pan debajo del brazo" o la célebre "Dios proveerá"... Dios seguro tiene muchos asuntos de que preocuparse, mas que todo de su creación que se cae a pedazos y no creo que se fije en las parejas que se reproducen como conejos y que esperan que todo se resuelva. Ya que somos profesionales que leemos el diario, vemos el noticiero y nos encontramos inmersas en un mundo cada vez más competitivo, me cuestiono lo siguiente: Por qué no dejar al combo maravilla (marido, perro, hijos y casa) por algo mucho más atractivo como un marido que me mantenga? Un solo "paquete" que resolvería todos mis problemas. Al final, estudiamos de todo (licenciatura, master, diplomado, protocolo y etiqueta), todo lo que se inventaron para ser esa mujer "virtuosa" que tanto decía mi madre. Cabe recalcar que no sólo contamos con esas habilidades, entiéndase que algunos dones hogareños y otros que se muestran debajo de las sábanas completan todo el estuche, más que completo para los hombres "poco interesantes" que atraviesan nuestro camino.

Con esta reflexión y viendo que cada día nuestra solvencia económica se ve más amenazada, debemos considerar que se debe elaborar un Plan de Acción que nos permita identificar a posibles candidatos que estén dispuestos a resolver nuestros "pendientes" y ofrecer además todo lo que se necesita para que una "joya" como nosotras se mantenga a su lado. La ecuación costo beneficio seguro les saldrá positiva y tendrán la satisfacción de haber realizado una excelente inversión que incluye ropa, zapatos, viajes, tratamientos de belleza y demás caprichos que podamos pensar. Al final, tendrán todo nuestro estuche y nosotras esbozaremos una sonrisa cada vez que nuestros maridos lleguen a casa.

Así que manos a la obra, empecemos por identificar a que lugares podría acudir nuestra víctima y cómo podriamos generar una demanda importante hasta luego cerrar la venta.

Que dicen? Espero sugerencias de todas!

domingo, 7 de junio de 2009

La búsqueda de empleo

Cuatro meses han pasado desde el día en que decidí dedicarme de tiempo completo a buscar empleo. Cuatro meses en los que la cuenta bancaria reporta cada vez menos haberes... y las facturas se apilan. Es posible que en estas circunstancias aumente un poco la presión y la mente se ponga a estupidizarse (si, bueno, no sé si la palabra existe, pero es linda) con ideas sobre una posible salida fácil? Es factible que yo haya llegado a la conclusión de que quiero un marido que me mantenga, única y exclusivamente porque me estoy ahogando en deudas y no tengo ni media perspectiva clara de conseguir empleo en el futuro próximo?

Ja! Como diría Manolito el de Mafalda: JA! Me río y me sigo riendo.

No. Mi respuesta es un clarísimo NO. Obvio que la presión aumenta... pero si buscar trabajo por hambre nos pone en mala situación de negociación; no quisiera imaginarme en el momento en que a mi mente estupidizada, le dé por buscar marido por hambre! No sé, pero no suena muy inteligente y yo (perdón por la falta de modestia), me considero una mujer inteligente.

Quiero un marido que me mantenga porque quiero tener la libertad de escoger un trabajo que me guste y me llene, sin tener que preocuparme de ver si ese trabajo, además, me da para pagar la renta. Soy ingeniero, me gusta la tencnología, me fascina, pero me gusta más escribir... mi trabajo ideal tal vez sería escribir sobre tecnología o sobre búsquedas de empleo, o sobre búsquedas de marido... o sólo escribir por escribir. Debería de ser capaz de encontrar la forma en que mis escrituras paguen la renta y los gastos de mi perro o bien, encontrar una pareja dispuesta a asumir los gastos de la familia y que me permita ser feliz escribiendo.

Mientras eso sucede, sigo buscando trabajo y no hay crisis financiera, ni permiso laboral que me haga perder la fuerza. Sigo con fuerza buscando el trabajo y sigo fuerte para buscar el marido.


viernes, 5 de junio de 2009

Una pequeña introducción

Este blog, con ayuda de todos los que lean, puede llegar a ser mucho más que un medio de expresión de los deseos de un grupo de personas, hasta convertirse en un punto de encuentro de filosofías, visiones y, quizá, hasta metodologías que enriquezcan nuestra búsqueda por el ideal.

No pretendemos hacer un sitio de búsqueda de parejas, sino de intercambio de ideas y experiencias que han llevado a las autoras a este momento en la vida. Este momento de llegar a la nada despreciable conclusión: Quiero un marido que me mantenga!.

Y es que a partir de la llamada liberación femenina, se ha hecho mucho énfasis en pretender que la mujer, en su misma declaración de independencia, acepte con su libertad la obligación de mantenerse a sí misma. Llámenme retrógrada, pero después de muchos años de matrimonio, de compartir las responsabilidades económicas de un hogar, y de muuuchos años de mantenerme a mí misma en independencia, he llegado a la conclusión de que para ser libre no se necesita la independencia económica, sino la espiritual.

Una pareja que te mantiene y que, además, te quiere, te respeta y permite tu crecimiento intelectual (ojo, que ser mantenida no singnifica ser inútil) me parece una idea de liberación mucho más grande que decir, yo debo hacerme cargo de mí misma en términos económicos.

Creo que lo que quiero decir es lo siguiente: Es bueno saber que una puede valerse por sí misma, sin duda. Es bueno saber que una puede ser independiente económicamente si el mundo se lo pide, de acuerdo. Mi conflicto está con la diferencia entre "puede" y "debe".


Retrógrada? Quedada? Mediocre? Nah... ni ahí... al menos yo no creo, tú que dices?

Comenta, comparte, escucha las visiones de las distintas autoras que nos van a ir acompañando con el tiempo... quédate y armemos una experiencia.